Este jueves 8 de mayo, la Iglesia universal recibió con profunda emoción la elección del nuevo Papa, marcando el inicio de un nuevo capítulo en la historia de la Iglesia. El mundo fue testigo de su aparición en el balcón central de la Basílica de San Pedro, tras la esperada señal del humo blanco que confirmó el término del Cónclave.
En medio de aplausos, banderas ondeando y un silencio expectante, el nuevo Sucesor de Pedro pronunció su primer saludo: «¡La paz esté con todos ustedes!», estableciendo desde el inicio una cercanía cálida y esperanzadora. En un emotivo recuerdo, agradeció la vida y el legado del Papa Francisco, reconociendo su testimonio de fe y su entrega hasta el último momento.
El nuevo Pontífice recordó con fuerza que “Dios nos quiere bien, Dios los ama a todos, ¡y el mal no prevalecerá!”, animando a los fieles a avanzar sin miedo, tomados de la mano de Dios y de los demás, como discípulos de Cristo. Con palabras claras, llamó a toda la humanidad a construir puentes, a través del diálogo, el encuentro y la unidad, para ser un solo pueblo en paz.
Este gran acontecimiento fue vivido con especial alegría en nuestro colegio. Al confirmarse la elección, el timbre sonó varias veces, anunciando con entusiasmo la noticia a toda la comunidad. Estudiantes y docentes salieron de sus salas, emocionados, para unirse en una oración de agradecimiento por la llegada del nuevo pastor de la Iglesia.
Luego, cada curso pudo seguir desde sus salas la salida oficial del nuevo Papa, escuchando con atención sus primeras palabras y recibiendo la bendición apostólica con la que se concedió la indulgencia plenaria.
Con profunda fe y alegría, damos gracias a Dios por este momento histórico y nos unimos a la Iglesia en oración, para acompañar al nuevo Santo Padre en su misión de guiar al Pueblo de Dios con esperanza, amor y firmeza.
